En la serie Star Trek de Gene Roddenberry, el primer contacto de la humanidad con una especie alienígena es con los icónicos vulcanos. Provenientes del planeta Vulcano, los humanoides lógicos de sangre verde y orejas puntiagudas se han convertido en una de las razas imaginarias más reconocibles de toda la ciencia ficción.
En 2018, los científicos creyeron haber descubierto un verdadero versión de vida del planeta de Spock que orbita la misma estrella que lo hace en el programa. Orbitando 40 Eridani A, a 16 años luz de distancia, se describió que el planeta tiene el doble del tamaño de la Tierra con años que duran 42 días. El planeta se llamó 40 Eri b.
Sin embargo, resulta que el Planeta Vulcano de la vida real no existe después de todo. Después de cinco años, un nuevo examen del planeta ha revelado que, en primer lugar, nunca fue un planeta real.
En el estudio revisado, los científicos informaron:”Presentamos una fuerte evidencia de que el planeta HD26965 b (o2 Eri b, 40 Eri b) informado [en 2018] no es un planeta, y más bien es causado por la actividad estelar.”
40 La existencia de Eri b fue cuestionada por otros científicos en el momento de su descubrimiento. El planeta inexistente fue encontrado por velocidad radial, midiendo las emisiones de luz de la estrella 40 Eridani para encontrar objetos que tengan una atracción gravitatoria.
Desafortunadamente para los Trekkies en todas partes, resulta que la supuesta atracción de 40 Eri b era no de un cuerpo celeste. En cambio, la posible atracción fue causada por la estrella misma, no por el planeta ficticio.
Descubrir exoplanetas con velocidad radial es más bien un toque y listo. Por un lado, es bastante preciso para detectar grandes exoplanetas. Sin embargo, encontrar planetas más pequeños tiene la costumbre de ser mucho más inexacto, de ahí el problema con el Planeta Vulcano.
La NASA esperaba realizar una investigación adicional sobre el planeta ahora inexistente. La supuesta cercanía del planeta a la estrella 40 Eridani lo convirtió en un fuerte candidato para un futuro hogar habitable para la humanidad. Ese futuro ahora nunca sucederá.
La humanidad aún está lejos de alcanzar las capacidades Warp que alcanzó ficticiamente en la historia de Star Trek. Sin embargo, todavía estamos explorando las estrellas, con misiones tripuladas a Marte previstas para la década de 2030. ¿Seremos extraterrestres de orejas puntiagudas? No. ¡Pero podemos soñar!